¿Qué pasaría si pudieras hacer buenas predicciones sobre cómo responderán los competidores a tus acciones?
¿Qué pasaría si pudieras tener esto en cuenta antes de tomar medidas para asegurarte de que la acción elegida es la correcta?
Y, mejor aún, ¿qué pasaría si pudieras hacer esto con un método científico en lugar de solo con conjeturas u “olfato”?
Comprender cómo es probable que las personas reaccionen a tus elecciones, es importante en muchas áreas de negocio e incluso en tu vida personal.
Por ejemplo, imagina que estás compitiendo en un mercado con un pequeño número de otras empresas, donde, si puedes anticipar sus movimientos, entonces puedes eliminar algunas de sus opciones o superarlos cuando hagan sus movimientos.
La teoría de juegos te brinda las herramientas que necesitas para pensar en esto y debieras utilizarla cuando es probable que tu éxito esté influenciado por las acciones de otros, cosa que en los mercados competitivos sucede todo el tiempo.
¿Qué es la teoría de juegos?
La teoría de juegos es un intento racional de predecir el comportamiento.
Se aplica en situaciones en las que el éxito de un individuo al tomar decisiones depende de las decisiones de los demás.
Los modelos simples incluyen un grupo de jugadores, una definición de las acciones que esos jugadores pueden elegir y las recompensas de esas acciones, es decir, cuánto ganará o perderá cada jugador por cada combinación de acciones.
Los fundamentos de la teoría de juegos fueron definidos en 1944 por John von Neumann y Oskar Morgenstern en su libro, "Teoría de juegos y comportamiento económico".
Para usarla, como los buenos jugadores de ajedrez, tendrás que pensar en la futura jugada posible, y las que puedan dispararse como respuesta a partir de esa, en cadenas tan largas como tu imaginación e intelecto lo permitan.
Cada jugada implica un costo y un beneficio, y el análisis de esto te dará una imagen de lo que cada jugador obtiene, ya que, a diferencia del ajedrez, la competencia no se limita a dos participantes.
Los teóricos de los juegos asumen que los jugadores son racionales, pero, existe una inmensa red de conexiones que acompañan a la racionalidad, y que a menudo quedan marginadas, características tan comunes e importantes como la emoción, la feminidad y la empatía, cosa que un buen analista no debiera hacer.
Para no asustarte, en general, y para facilitar el análisis, en el uso de la teoría de juegos solo se toma la racionalidad económica de las acciones y las expectativas racionales en cuanto a los mercados, como restricciones a la hora de modelar.
Un aspecto crucial de la especificación de un juego involucra la información que tienen los jugadores cuando eligen estrategias.
Los juegos más simples, desde la perspectiva de la estructura lógica, son aquellos en los que se supone que los jugadores tienen información completa y perfecta, lo que significa que, en cada punto donde la estrategia de cada uno plantea una acción, se sabe todo lo que ha sucedido en el juego hasta ese momento.
Aquí nuevamente, como el ajedrez, los jugadores han seguido toda la acción y conocen las reglas en común.
Por el contrario, los juegos más complejos asumen información imperfecta o incompleta, donde no sabemos qué elecciones han tomado los otros jugadores, por lo que deberíamos plantear todas las posibles para ver en qué condición llegan al punto en que estamos.
Podríamos complicar esto mucho más, pensando en la cadena de acciones futuras de cada jugador y nuestras posibles respuestas, pero creo que lo explicado es suficiente para entender los beneficios de usar esta teoría, y más o menos de qué se trata, aunque el que quiera usarla deberá profundizar mucho más, y/o llamar a un experto que lo ayude.
¿Jugamos?
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