No siempre tenemos que hacer el trabajo como se hizo siempre.
Ya sea que el mismo comienza a aburrirte o que ocupas una nueva posición reemplazando a alguien, hay cosas que puedes cambiar para sentirte mejor con la tarea que te toca, pues, de no hacerlo, tu carrera puede llegar a estancarse, pero para tu mente no será una posibilidad, sino que lo hará sin remedio.
Veamos qué pasos dar y en qué poner atención:
Analiza y decide qué quieres cambiar
Puedes realizar cambios en una o más de las siguientes áreas para diseñar tu forma de trabajo, de modo que esté más cerca de tu "ideal".
Contenido de la tarea: Esto implica mejorar la forma en que se hacen las cosas, usando habilidades que ya tienes, o usar tu conocimiento para cambiar los métodos de trabajo utilizados hasta el momento de modo que puedas generar mejores resultados.
Innovar es la consigna.
Relaciones: Busca formas de tener interacciones más satisfactorias con otras personas durante el curso de tu trabajo cada día.
Cuanto mejor relacionado estés con tu entorno, más conocerás sobre cómo funciona todo y más productivo será tu trabajo.
Propósito: También puedes redefinir tu trabajo para reflejar el impacto real de lo que haces en la organización en la que estás, extendiendo el objetivo más allá de lo inmediato.
El cambio de propósito del trabajo no implica ningún cambio real en el contenido del mismo, pero sí un cambio en la visión que tu tienes del mismo y la importancia que cobra.
Claro que, si bien esto ciertamente puede aumentar el disfrute de la tarea, no te ayudará a expandir tus habilidades o modificar en gran medida tu rendimiento por lo que mejor, intenta primero efectuar cambios en las categorías anteriores para aprovechar al máximo la reelaboración de tu trabajo.
Evalúa cómo los cambios te afectarán a ti y a tu entorno
El otro punto importante es evaluar el impacto potencial de estos posibles cambios en tu entorno de trabajo más amplio, teniendo en cuenta a tus clientes, tus colegas, tu jefe, y la organización en su conjunto.
Recuerda que la reelaboración efectiva del trabajo generalmente depende de encontrar una solución beneficiosa para todos.
Dependiendo de los cambios que implementes, lo que obtendrás podría ser:
un simple disfrute porque te sientes más a gusto con lo que haces
un impulso a tu autoestima porque fuiste capaz de generar el cambio
un abanico social mayor por tu amplia interacción con personas de otros departamentos
Y por suerte, los beneficios no terminan con los que tu obtienes sino que tu organización consigue de esto una fuerza laboral más motivada y efectiva.
Así que... ¿cuándo comienzas?
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